Friday, February 29, 2008

como Bejarano


No estaba muerto, andaba trabajando. Todo bien en este mundo. Para todos los amantes de los sintetizadores analógicos, aquí les dejo un dibujito que sólo a ustedes -nerdos electrónicos- podrá esbozarles una sonrisa.
Feliz fin de semanita. Si toman no manejen y si toman vino tinto, cómprense uno que no haga que su esófago arda, nada de: casillero del diablo, trio, concha y toro, santa rita, gato negro y demás vinagres similares.

ps: hace un par de años, se importaban algunas añadas de vinos chilenos que resultaban pasables. Ahora sólo sirven, si acaso, para cocinar o como diría mi maestro Raúl Rincón: están buenos, pero para enjuagarse los dientes.
ps2: en la comercial mexicana tienen un buen vino riojano de nombre Campo Viejo en 134 pesos. No es extraordinario, pero comparado con los arriba mencionados, es un elixir de los dioses..

Tuesday, February 19, 2008

Retal -fragmentos de cultura contemporánea-


Recibo con emoción por medio de correo postal, dos ejemplares de la revista gallega, editada en Vigo, España, de nombre: Retal. En ella viene una entrevista que me hicieron el año pasado, a raíz de nuestra participación en el festival de Caldas de Reis, un lugar cercano a Vigo , en donde cada año se arma un gran frestival de música.
Vaya desde aquí un saludo a Gisela Ahumada y Eloy García, los esditores de la revista.



ps: está en Gallego,

historias de calentón


Casi nunca me enfermo ni ando con dolencias físicas. Si acaso una vez al año me da una gripe latosa que curo con cinco sobres de Thera Flu en tres dias . No soy de los que les duele la cabeza una vez por semana o de los que enferman del estómago al primer taco vario que comen en la calle, ni nada por el estilo.

La semana pasada fue una semana excepcional, primero me lastimé una mano y duré cinco dias con la mano hinchada, cuando apenas se empezaba a desvanecer el morado de la mano, vinieron de visita dos buenas amigas a casa. Después de saludarme y tijerear los aparatos alectróncios musicales que no habían visto, se sentaron en el sillón café. Una de ellas tenía mucho frio y le ofrecí traer a la sala el calentón que regularmente uso en la recámara y que utilizo quince minutos, mientras me baño por la noche; casi siempre me baño dos veces el mismo dia. Como bien decía mi padre: uno no debe acostarse en sábanas limpias, sin antes quitarse el polvo de la tarde. El caso es que el cordón del calentón es muy corto y la rendija quedó a 15 centímetros de mi pie izquierdo. Pasó la noche entre dos botellas de vino y unos champiñones al ajillo que les preparé. Últimamente he descubierto en las artes culinarias, una forma de terapia y distracción. He disfrutado mucho cocinar para mis amigos y ahora que tengo tiempo, he estado perfeccionando varios de mis platilos favoritos. Paso buena parte del dia leyendo recetas de cocina, escuchando y componiendo música.

Volviendo a la visita de mis amigas, a una de ellas tenía más de un año sin verla y me contó que ahora vive en Oaxaca, a la orilla de una la playa. Mientras mojaba el pan con el aceite de oliva que quedaba de los champiñones, pensaba en lo bueno que sería estar en un lugar así, apacible y sin frio.

Ellas se fueron, yo apagué el calentón que ya llevaba tres horas aventándome viento como fuego en la parte izquierda de la parte baja de mi pierna izquierda y me fui a dormir. A La mañana siguiente, al tratar de incorporarme al mundo, sentí el pie como fracturado. No había hinchazón, ni área morada. Mi pie aparentaba estar normal a simple vista, pero el dolor era terrible, inmesurable. Tardé más de dos horas acostado y sin poder poner el píe en el suelo, para deducir que el calor del calentón y el enfriamiento posterior eran la causa de mi dolor.

Utilicé la misma crema cara de mentol de marca gringa, que había utilizado por cinco dias para aliviar el dolor de mi mano, pero parecía no surtir efecto. Todo ese día anduve caminando como quién siente un clavo enterrado a cada paso. Al siguiente dia amanecí peor.

Me llamó por teléfono la esposa de un buen amigo, a la que conozco desde hace casi quince años, para invitarme a una reunión. Le dije que no podría asistir y le conté la historia del calentón. Me dijo que ella sufre fuertes dolores en la espalda y que el único remedio en forma de ungüento que le ha servido es uno de nombre Mamisán. Me lo ofreció servicio a domicilio. Llegó quince minutos después con el tal Mamisán de frasco amarillo. Lo unté en mi pie casi inmóvil, mientras gritaba en cada frotación. Una hora después ya estaba caminando. Al día siguiente, el dolor era sólo un recuerdo. Me sentía como listo hasta para correr un maratón, aunque la verdad nunca he corrido más de cinco kilómetros
Mamisán Ungüento es una crema de uso veterinario fabricado por Pfizer, los que hacen la viagra. Cuesta sesenta pesos y les juro que no faltará en mi gabinete. Mamisán te levanta el pie de su estado inmovil. Sospecho que es la misma fórmula de la pastilla azul, pero en crema.

Ahora que utilizaré ungüento de uso veterinario para mis dolencias musculares, creo que alguna de mi exnovias tenía razón, cuando me dijo hace unos años, que era yo un perro....

Monday, February 18, 2008

historias ficticias de amor part1





Una buena tarde te encuentras con esa mujer que te vuelve loco el corazón. Llegas a tu casa y duermes deseando soñar con ella "mientras afuera pasan los aviones" diría Calamaro. Estas tan lleno de vida que sientes que el cuerpo no te alcanza. Haces planes de felicidad compartida. De pronto llega una mala noche, una respuesta equivocada, una confusión estúpida que acaba con todo como acaban las vacaciones del verano.
Te despides de ella, esperando no guardar rencor. Te levantas al dia siguiente, con la utópica ilusión de que llegue otra buena tarde y que la segunda parte de esta historia no se repita. Y así sigues y sigues, mientras piensas que:

El amor nace de la nada, pero lo jode cualquier cosa.

Sunday, February 17, 2008

not a pretty picture


nota periodística aparecida en L.A. Times

Tijuana tourism plunges amid drug violence
The one-time party mecca is a ghost of its former self. But merchants say beautification efforts and police crackdowns have left downtown safer and spiffier than in years.
By Richard Marosi
Los Angeles Times Staff Writer
February 17, 2008
TIJUANA


Marcos Rojas, a waiter at Mr. Tequila Restaurant, roams the Plaza Viva Tijuana, eager to pour double shots for partying tourists. This downtown gateway used to be crowded with Southern California day-trippers, Midwestern families and busloads of German and Japanese tourists.
But empty bars and shuttered businesses now outnumber people mingling near the broken fountain. Rojas, who earns tips by making a show of slamming tequila shots on the table and pouring them down customers' throats, says it's been a week since he performed one of his signature tricks, twirling a tourist on his shoulders.
"Look around, it's dead," he said.
In the sleepy plaza, down the lonely pedestrian promenade leading to the heart of the tourist district on Avenida Revolucion, bored waiters and strip club hawkers compete for the trickle of customers, while old-time merchants wax nostalgic about the days when a downtown dotted with attractions drew millions of visitors, including the occasional Hollywood star.
Tijuana's recent wave of violence appears to have driven another nail into the coffin of a tourism industry already hobbled by its reputation for tacky tourist traps and rowdy bars and by long waits at the U.S.-Mexico border crossing.
Visits are down 90% since 2005, when an estimated 4.5 million came to the area, according to the downtown merchants association. On an average day now, only about 150 tourists show up, the association says. Some encounter the latest Tijuana spectacle: convoys full of heavily armed soldiers rumbling down Avenida Revolucion.
Grant Bourne, a 23-year-old tourist from Australia, took a break from visiting San Diego's beaches to spend a recent afternoon in Tijuana, where he marveled at the striking contrasts between the two cities.
The odd sight of soldiers next to the mariachi-filled Plaza Santa Cecilia enriched his visit in a culture-clash sort of way, he said, and the military presence certainly made him feel safe. But he planned to stay downtown, he said, because "I was told not to stray too far off this street."
The tourism collapse is especially sad, many merchants and tourists say, because people may not be aware that recent beautification projects and police crackdowns have left the area safer and spiffier than it has been in years.
Tree-lined promenades feature repaved sidewalks and roadways. Police sweeps have cleared out the drug addicts. Gone too are most of the beggars and hookers. At the balcony bars, club owners have turned down the ear-splitting volume.
Many stores showcase high-quality products: silver from Taxco, Talavera pottery from Michoacan, handcrafted stained-glass and leather products. The Cuban cigars at the business association-approved stores are authentic, and tourists can get custom-made furniture and pinatas at the historic arts and crafts market.
"That's what really represents downtown Tijuana," said Andres Mendez Martinez, coordinator of the merchants association. "Quality products and traditional goods from all over Mexico."
Still, they acknowledge, that's not what Tijuana is famous for these days. It's the bloody battles between police and organized crime that make the headlines.
Since Jan. 1, more than 50 people have been killed across the city, some in wild shootouts that terrified bystanders. Last month, police discovered an organized-crime hide-out near downtown that they said included a training center for hit men complete with a soundproofed basement shooting range.
Recently, the upscale restaurant Hacienda Cien Años, which once drew tourists, was identified by U.S. authorities as a front for money laundering.
Downtown has been flooded with police and has been largely free of the violence. No bystanders have been killed in the shootouts. A crackdown on corrupt transit cops has resulted in fewer reports of extortion, and merchants immediately report officers who stop tourists without reason, according to police.
Still, the negative image hangs over the city. "In reality, the violence isn't targeting tourists. It's between drug traffickers, criminals and police. But the tourist doesn't know the difference," said Victor Clark Alfaro, director of Tijuana's Bi-National Center for Human Rights.
Meanwhile, merchants say even some of those who haven't been scared off by crime reports may be reluctant to visit because of new, stricter requirements for Americans reentering the U.S. from Mexico -- and fears that the rules will make crossing the border slower. U.S. citizens used to get by at the border crossings with oral declarations of citizenship. Now they need to show proof both of citizenship and identity.
"Americans had 9/11; we had 1/31," said Rojas, the waiter, referring to the date the new rules went into effect.
Aiming to ease the transition to stricter requirements, Baja California tourism officials recently announced a new program called "Get Your Passport" that offers discounts at certain hotels and restaurants to people with U.S. passports.
In the early days of Tijuana tourism, in the 1920s and 1930s, the economy grew fast by catering to Americans' appetites for vice, and the city's tourism fortunes have long risen and fallen with the changing social mores and economy north of the border.
The fabled Agua Caliente casino and racetrack thrived during Prohibition and attracted such Hollywood stars as Charlie Chaplin and Gary Cooper.
In the postwar era, San Diego's growth as a U.S. Navy port provided a steady stream of thrill-seeking sailors.
Tourist flows peaked in the 1970s, say experts and longtime merchants, but the end of horse racing and the closure of the jai alai arena in the early 1990s started a steady decline. Along Avenida Revolucion, bars and nightclubs offering a warm welcome to underage drinkers opened to take up the slack.
Only glimmers of the past remain.
At the historic Caesar's Restaurant, which calls itself the "officially certified" home of the Caesar salad, a picture of Paul McCartney sipping a margarita hangs over the bar. A bartender, engrossed in a chess game with the lone customer, dismissed questions about the ex-Beatle's visit.
Meanwhile, a waiter was busy hanging up a sign on the railing outside -- for Caesar's Men's Club. At night, the former banquet hall in the back of the restaurant becomes a strip club. "Come by later," said a waiter. "The lap dances are only $20."
Farther down Avenida Revolucion, pushy shoeshine boys and loud barkers compete for visitors' attention, tossing out such lines as "Got a Mexican minute, mister?"
Many bars offer all-you-can-drink deals. Locals pack the Caliente casino, with its 10-cent slots.
Young men urge passersby to saddle up for pictures on the Tijuana zebras, the donkeys painted white with black stripes that epitomize Tijuana tackiness.
It was all too much for James Osborne, a 25-year-old visitor from Iowa. Standing under a "Come Back Soon Amigos" sign, he said his 15-minute visit with a friend was too long.
"We've had enough," Osborne said. "Everybody's trying to hustle you."
Keith and Diane Heuser, hospital administration professionals from Iowa, had a different experience.
The couple and their friends bought a $180 leather jacket and a silver necklace, ate chiles rellenos and drank margaritas.
"We're having a great time. It's tacky but entertaining," said Keith Heuser, while smoking a Cuban cigar on a stroll down lonely Avenida Revolucion.
It used to seem as if Tijuana could attract an endless supply of tourists like the Heusers.
"We never imagined that tourists would stop coming," said Clark Alfaro of the Bi-National Center for Human Rights. "It's a shame."

Thursday, February 14, 2008

esto no es musica

Luego contaré aquí de mi mano derecha vendada e inservible por 4 dias. Mejor les digo que hemos subido varios discos para que los descarguen y sean felices. Dónde?

estonoesmusica.blogspot.com

Monday, February 4, 2008


"...Sound formed in a vacuum
May seem a waste of time."


Es una frase que cantaba New Order y me sigue pareciendo extraordinaria.

Sunday, February 3, 2008

esto no es musica


esto no es musica, es el nombre el blog que hemos decidido abrir para "colgar" allí, discos y reseñas de la música que nos gusta escuchar y discutir. Trataremos que sean discos difíciles de conseguir en las tiendas, algunos hasta descatalogados, bootlegs o simplemente discos que nunca fueron re-editados en CD. Alomejor se cuela uno que otro album que no tenga dichas características, excepto la de ser discos que nos gustan a morir. Por lo pronto los colaboradores somos, mi hermano pedró césar, jorge verdín, pirivox y yo mero -su no-seguro servidor-..

Disfruten de esto no es música y recuerden que el download es cultura.


Para visitar el sitio denle click aquí