buena noche la de anoche!
Casualmente, me encontré con mi amigo el poeta exiliado victor hugo limón, en una tienda de vinos, con él compartí varias noches de desvelos allá entre en 95 y el 99 en el bar que llaman El Turístico , pero que realmente se llama El Patio. Eran los tiempos en que el bar era frecuentado por los profes de literatura y los alumnos de humanidades. Antes de la llegada de los bloggeros locales y los emos.
La música de la reunión de anoche estuvo a cargo de un venezolano el cual me presentaron allí mismo. Lástima que su gusto musical incluía a Juanes y otras tormentas similares. Lo único que medio salvó el desastre auditivo fueron un par de rolitas de mecano. No más.
El vino cumplio las expectativas, un par de Beauzeaux (vintage 2005), un vinito divertido, afrutado y apropiado para una reunión en donde el vino no es el protagonista de la noche. Buen precio, agradable sabor. Otro más, fue un Gina (san giovese, 2005). Bueno a secas.
Compré una botella de 337 de Lodi, había leído un par de reseñas en donde el vino quedaba muy bien parado y cuando lo vi en la tienda no lo pensé dos veces. Casualmente, en cuanto llegué a la reunión y le pregunté a mis amigos sobre una degustación de vinos a la que fueron el domingo pasado y que yo no pude asistir, debido a la fila de 3 horas que había para cruzar la frontera, ellos me dijeron que la pasaron de maravilla, que los vinos fueron de buenos a muy buenos, y que sin duda el mejor había sido uno de nombre 337. Supongo que era el destino.
Estoy guardando la botella para este fin de semanita.
En resumen: buena noche, buena plática, buen vino, buenas risas, mala música.