I´m back too!
Después de más de un año de extravío en cuanto a producción musical se refiere, me siento re-conectado con la composición ("inspiración" dirían los románticos que ven musas) y la experimentación sonora. Estas últimas semanas han sido de jornadas de entre 10 y 14 horas de trabajo musical continuo y tenía mucho tiempo que no me sentía tan bien, tan extenuantemente bien. Pensé que me costaría trabajo romper con algunos hábitos horarios adquiridos, pero ni los recuerdo ya. La música es capaz de llenar casi toda mi vida. Siempre ha sido igual.
En cuanto a música he llegado a la conclusión de que soy Bi-polar. Meses de no aterrizar ninguna idea musical y de pronto llega algo similar a un rayo fulminante y parece que al día no le alcanzan las horas para destilarlo todo.
Sueño con ideas musicales y me levanto a las 5 a. m. a grabarlas.
Hoy mi dia musical comenzó a las 9 a.m. y terminó a las 11:30 p.m.
El golpe de adrenalina ha sido tal que he logrado sacrificar mis obligatorias 8 horas de sueño y no lo extraño.
Tenía al menos un par de años que no me sentía tan completo, tan entusiasmado y tan lleno de locura.
El otro día me preguntaron en una entrevista el por qué hacía música y contesté socarronamente que hacía música para hacer mi vida más interesante, pero la verdad es que hago música porque es la emoción más grande que he descubierto.
Hacer música, hablar de música, pensar en música y soñar con música son las cuestiones que ocupan el noventa por ciento de mi vida.
Qué cosa!